Hoy en el país debe eliminarse todo los gastos superfluos o de importancia secundaria pero la educación debe fortalecerse precisamente como un acicate para vencer la crisis.
El mejoramiento de la calidad de la educación pública costarricense (preescolar, primaria, secundaria, superior, técnica) constituye la principal herramienta de desarrollo.
En primer lugar, porque atiende a un 92% de la juventud y la niñez costarricenses. Un sistema educativo público de alta calidad dota a los sectores de menores ingresos -que sólo tienen acceso a este sistema- de oportunidades efectivas de ascenso social.
En segundo lugar, porque la calidad de la educación define la productividad de la mano de obra, lo cual, a su vez es, juega un papel crucial en la competitividad internacional y el crecimiento de nuestra economía.
En tercer lugar, porque la calidad de la educación influye críticamente en la capacidad del país para el avance tecnológico y la innovación, lo cual es también fundamental para la competitividad y el crecimiento económico.
Finalmente, la educación es importante porque la materialización de activos esenciales para elevar la calidad de vida; tales como la protección del ambiente, la higiene, el tratamiento de los desechos sólidos, la seguridad ciudadana, el cumplimiento de los deberes ciudadanos, el respeto a las leyes y la normas de convivencia social; tiene más posibilidades entre más elevado sea el nivel educativo de la población.
Las tareas necesarias para mejorar la calidad de la educación pública no deben esperar a que el país tenga un elevado nivel de ingreso. Por el contrario, la educación no es consecuencia sino causa del desarrollo. Por ello el monto a invertir en el sistema educativo y sus estándares de calidad deben adelantarse a la capacidad económica del país.
Por lo anterior sorprende que el Gobierno haya considerado reducir el presupuesto de las universidades públicas como herramienta para enfrentar la crisis económica. Precisamente por la importancia que tiene el sistema educativo público para el desarrollo es uno de los sectores que deben privilegiarse en la crisis en lugar de subordinarse a las sumas y restas fiscales. En una finca ganadera la calidad del pasto es esencial para su rentabilidad. En una crisis puede posponerse la pintura del portón de entrada pero en pastos más bien debe aumentarse la inversión con el fin de incrementar la productividad y superar la crisis. Hoy en el país debe eliminarse todo los gastos superfluos o de importancia secundaria pero la educación debe fortalecerse precisamente como un acicate para vencer la crisis.
La decisión de este gobierno de disminuir el presupuesto a las universidades cae en lo dramático, que mejor inversión en preparar a los jóvenes para enfrentar el futuro con títulos que los puedan incentivar en un mundo tan complejo y tan dinámico, y ahora todo sumado a esta gran crisis.
ResponderEliminarHay algo que es cierto, los dineros invertidos por los gobiernos de turno en las universidades privadas, en comparación a lo que reciben escuelas y colegios, pues llega a una población más reducida en las universidades.
Hay que incentivar a las universidades a vender servicios de alta calidad, ya que están bien preparadas para ellos, ya que muchos no podrían estudiar si no existieran esas universidades estatales.
Creo que la historia juzgara a cada uno de nuestros gobernantes, y este gobierno en muchas áreas le ha quedado y le quedara debiendo a los costarricenses.
Saludos
Creo también que es un error lo que hace el gobierno del presidente Arias. Hace poco oí un comentario que le hicieron al ministro de Educación de Finlandia donde que era lo necesario para salir del subdesarrollo y contestó ëducación, educación y más educación¨. Como dice usted Ottón en el comentario la educación es una inversión y no un gasto, esto me acuerda aquel diferendo que hubo desde la administración Figueres Olsen sino me equivoco que si los gastos del ICE en inversión eran gasto o inversiób y que el FMI dentro de su contabilidad ortodoxa se asociaba a la primera. Por otro lado en nuestro país a diferencia de los EEUU por ejemplo las universidades estatales son de mayor calidad que las privadas o son preferidas por la población de los sectores altos y bajos. Esto hace que las públicas se vean en la necesidad de estar financiadas de buena forma ya que las privadas por trabajar por una utilidad no invierten en investigación por ejemplo. Y un alma mater no se construye de la noche a la mañana. En un comentario que leí recientemente del Lic. Arnoldo Mora en La República dice que solo las universidades públicas en Costa Rica hacen investigación en Centroamérica. Entonces hay que ver lo importantes que son en el desarrollo científico y económico para nuestro país. No dejemos que muera la inteligencia como le dijo una vez Rodrigo Madrigal Montealegre a Telmo Vargas Ministro de Hacienda de entonces de querer reducir los presupuestos de la universidades públicas.
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